La Asamblea Consultiva de Parlamentarios sobre la Corte Penal Internacional y el Estado de Derecho (ACP-CPI) es la única reunión mundial de legisladores centrada únicamente en el sistema del Estatuto de Roma de la CPI.
La ACP-CPI es el proyecto más grande de la Campaña de PGA para el Estatuto de Roma de la CPI. Esta reunión da la posibilidad a varios cientos de legisladores de todos los continentes a que discutan y definan estrategias para avanzar en la universalidad y efectividad del Sistema del Estatuto de Roma.
2002: el comienzo
La ACP-CPI se lanzó en 2002 bajo la Campaña para el Estatuto de Roma de la CPI y gracias al liderazgo del Hon. Irwin Cotler, MP (Canadá), ex Fiscal General y Ministro de Justicia, y el Senador Raynel Andreychuk (Canadá), coordinador del Programa de PGA de Derecho Internacional y Derechos Humanos (1999-2003). La primera sesión se celebró en Ottawa en 2002, coincidiendo con el año en que entró en vigor el Estatuto de Roma de la CPI. De 2002 a 2004, la ACP-CPI se celebró anualmente. A partir del 2004, la ACP-CPI tiene lugar cada dos años.
Un llamado estratégico a la acción
La ACP-CPI se caracteriza por lo siguiente:
- Las sesiones se llevan a cabo en lugares estratégicos para facilitar la mayor participación de legisladores de ciertos países para avanzar en la ratificación/adhesión e implementación del Estatuto de Roma y los instrumentos internacionales relacionados.
- Al final de cada sesión, se adopta un documento o resolución final que los parlamentarios usan como una hoja de ruta para promover iniciativas políticas que fortalezcan el sistema del Estatuto de Roma de la CPI.
- Las reuniones de los Grupos de Trabajo Regionales se llevan a cabo en paralelo, solicitando todas las opiniones sobre la CPI y las iniciativas para el refuerzo del Estado de derecho, incluso de aquellos que siguen siendo críticos o escépticos sobre el papel que desempeña este tribunal internacional.
- PGA emplea una metodología de diálogo interparlamentario, intercambio de experiencias entre pares y un enfoque no partidista donde no se excluye ninguna voz de representantes elegidos democráticamente.